La costumbre.

En el pasado fuiste mi obsesión. 

Deseaba tanto tus besos, que soñaba con ese momento noches enteras, veía la perfección reflejada en tu cara, podía llegar a hacer cualquier cosa para tenerte cerca, a veces pienso que me comporte como una verdadera estúpida…

Quizás me acostumbre a ti, a tus mentiras, a tus caras, a tus ojos, a tu silencio. Me acostumbré a quererte por como eras…No hay duda que me acostumbré a ti.

*Y ahora no me queda nada, ni siquiera fuerzas para seguir, ni tengo ganas de quererte como antes. Creo que lo que sigue presente es esa costumbre, ¿nunca te ha pasado que te has acostumbrado tanto a alguien que cuando lo dejas le echas de menos? Pues yo me acostumbré a ti tanto que cuando intento olvidarte no puedo… llámame estúpida, pero esta estúpida quiere tus besos…